El temido efecto rebote, también conocido como efecto yo-yo,
es lo que se conoce en las dietas extremas en las que se pierde muchos
kilos en poco tiempo y luego se vuelven a recuperar o incluso aumentar.
Se estima que estos “efectos rebote” provocan que finalmente se aumente
el peso hasta en un 20% más de cómo se estaba inicialmente.
¿En cuanto tiempo se vuelve a recuperar lo perdido?
Pues puede ser tan rápido como una semana como en dos años. Como ya
hemos comentado en más de una ocasión, las bautizadas como dietas
milagro, dietas rápidas que alcanzan pronto su objetivo, no hacen más
que evidenciar y no poner fin a los malos hábitos en la comida, y es
precisamente ese motivo el que provoca el temido efecto rebote.
De nada vale bajar rápidamente de peso,
si lo único que se logra es aumentar la ansiedad por ingerir alimentos
que anteriormente ya se degustaban. Por eso, en factorquemagrasa
siempre recomendamos una reducción de peso paulatina y progresiva, de
este modo se van adquiriendo nuevos y mejores hábitos poco a poco a la
vez que se pierden kilos.
Causas del efecto rebote
Las causas principales del efecto rebote o efecto yo-yo,
es la propia dieta, los desequilibrada, restrictiva o deficiente que
pueda ser en cuanto alimentos y nutrientes. Las dietas extremas, que
suelen ser cortas en duración pero exageradamente limitadas en
nutrientes, producen una reacción en el cuerpo que lo programa para un
tiempo determinado en el que se tiene que “sobrevivir”, pero una vez
superada la prueba, el cuerpo vuelve a “pedir” aquellos alimentos con
los que solía alimentarse. Podríamos decir, que de alguna manera el
cuerpo almacena alimentos para un estado de emergencia, y luego se nutre
de ellos en momentos que los necesita.
Los resultados de las dietas milagro
Si bien es cierto que en un primer momento los resultados pueden ser positivos,
es probable que rápidamente y debido a este efecto rebote se pase de la
alegría a la decepción, con el agravante de notar un físico deteriorado
y con la autoestima tocada.
Las dietas milagro que provocan estos
efectos rebote se caracterizan por limitar al máximo la ingesta de
calorías (no más de 1300 diarias en mujeres y 1500 en hombres), además
de prohibir el consumo de hidratos, proteínas y grasas.
Si una dieta tiene como objetivo perder más de un kilo por semana, podríamos clasificarla como una dieta milagro.
Así que, el principal consejo que
podríamos dar es que se tenga mucho cuidado con este tipo de dietas, ya
que a veces lo único que se consigue es un temido efecto rebote.
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